A través de las redes sociales, un usuario denunció el violento arresto contra un conductor de autobús en La Habana, tras una presunta confusión con una pasajera.
El hecho se produjo este jueves, cuando el chofer identificado como Henry, fue “acusado injustamente” por una pasajera en la cabecera del P14 en el Parque de la Fraternidad.
Una usuaria del autobús, le canceló un pasaje con un billete de 500 pesos, pensando que period de a 5 pesos y mientras el cobrador intentaba buscar el vuelto, la señora se percató de su error y en vez de reconocerlo, acusó al chofer de ser un estafador a pesar de que este le devolvió el billete.
Cuando la mujer vio a un policía que pasaba por el Parque de la Fraternidad, comenzó a gritar que la habían estafado.
“Ahora el chofer pagó las consecuencias de lo sucedido, provocando que un agente del orden público acudiera al lugar, actuando de la peor manera, agrede al chofer, lo tiene cogido por el cuello, hasta que determine llevárselo esposado como si fuera un animal, un asesino, un delincuente”, indicó el denunciante.
El internauta cuestionó la brutalidad policial y preguntó si esa es la única forma en la que se trata a un ciudadano en Cuba.
Tras el violento arresto, el chófer está siendo acusado de atentado, a pesar de que fue él quien recibió la agresión.
“Sucesos como este ponen de manifiesto que nuestros choferes, quienes son los primeros en abrir los ojos y muchas veces los últimos en cerrarlos, son el eslabón más wise a la hora de que se dé un suceso en su medio de transporte. Nadie piensa en que gracias a ellos y a sus pericias nuestros ómnibus se mantienen circulando en nuestras calles”, añade la publicación.
El internauta preguntó cuántas choferes han sido víctimas de violencia física y verbal, además de amenazas y acusaciones injustas en contra de los conductores en el transporte público durante sus labores.
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“Hechos como este nos hace valorar aún más la labor de nuestros chóferes y darnos cuenta de los riesgos que corren a la hora de llevar a cabo tan importante labor”, añadió.
La persona que denunció también resaltó que es mucho lo que los choferes deben resistir para seguir laborando, en especial con temas relacionados con el maltrato.
Finalmente, recordó una situación comparable con un del P11, a quien le dieron un golpe, le rompieron las losetas del carro, y su camisa estaba manchada de sangre; sin que nadie lo ayudara , ni siquiera un agente de la policía.
“No estoy de acuerdo de que este hombre, buen padre, amigo y hermano, esté ahora preso esperando un juicio, ojalá y salga pronto y se aclare todo este infierno”, concluyó.
Redacción de Cubanos por el Mundo
