París
CNN
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El gobierno francés ha forzado a través de planes controvertidos para aumentar la edad de jubilación del país de 62 a 64 años, una medida que probablemente inflamará el movimiento de protesta del país que dura semanas.
El presidente francés, Emmanuel Macron, activará poderes constitucionales especiales para promulgar el proyecto de ley de reforma de pensiones propuesto, anunció el jueves la primera ministra Elisabeth Borne en la Asamblea Nacional, que aún no había votado sobre la propuesta.
“No podemos apostar por el futuro de nuestras pensiones”, dijo Borne en medio de abucheos y cánticos de los legisladores. “Esta reforma es necesaria”.
Los líderes sindicales en Francia convocaron nuevas manifestaciones tras el anuncio de Borne, con varios miles de personas reunidas en la Plaza de la Concordia de París y en varias otras ciudades de Francia el jueves por la noche.
“Al recurrir a [constitutional article] 49.3, el gobierno demuestra que no tiene mayoría para aprobar el aplazamiento de dos años de la edad authorized de jubilación”, tuiteó Laurent Berger, titular de la CFDT, uno de los sindicatos que encabezan las protestas.
Philippe Martínez, líder del sindicato CGT, también pidió más huelgas y protestas, según BFMTV, afiliada de CNN.
Protestas masivas se han llevado a cabo regularmente en toda Francia desde mediados de enero, con millones de personas que expresaron su oposición al plan del gobierno. Las huelgas masivas han afectado el transporte y la educación, mientras que en la capital, París, la basura no recolectada se acumula en las calles.
el gobierno tiene argumentó esa reforma es necesaria para mantener las finanzas del sistema de pensiones fuera del rojo en los próximos años.
“El objetivo es equilibrar las cuentas sin subir impuestos ni recortar pensiones. Hay varias opciones sobre la mesa, pero todas incluyen aumentar la edad de jubilación”, dijo el portavoz del gobierno, Olivier Veran, a los periodistas en enero, según Reuters.
El proyecto de ley de reforma de las pensiones fue aprobado por el Senado francés el jueves, pero no se esperaba que fuera aprobado por la Asamblea Nacional, la cámara baja del parlamento del país, donde los legisladores debían votar esta tarde.
La sesión se detuvo temprano por el anuncio de Borne. Los legisladores estallaron en escenas caóticas cuando ella explicó la decisión del gobierno, luchando por ser escuchados mientras los legisladores cantaban el himno nacional francés “La Marsellesa” y otros sostenían carteles que decían “No a los 64 años”.
Borne también criticó a los legisladores de extrema derecha en la cámara baja por no respaldar la legislación.
Marine Le Pen, líder del partido de extrema derecha Agrupación Nacional, pidió la renuncia del primer ministro.
“Después de la bofetada que acaba de dar el primer ministro al pueblo francés, al imponer una reforma que no quieren, creo que Elisabeth Borne debería irse”, tuiteó Le Pen el jueves.

La reforma de las pensiones en Francia, donde el derecho a jubilarse con una pensión completa a los 62 años es muy apreciado, es siempre un tema muy delicado y más ahora que el descontento social aumenta por el aumento del costo de vida.
Pero con una de las edades de jubilación más bajas del mundo industrializado, Francia también gasta más que la mayoría de los demás países en pensiones, casi el 14% de la producción económica, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos.