Cubanos en varios barrios de La Habana y otras ciudades volvieron a tomar las calles el viernes golpeando ollas y sartenes y exigiendo el restablecimiento del servicio eléctrico como lo habían hecho el jueves, luego de que una falla en la deteriorada crimson eléctrica de Cuba dejara al país en una oscuridad casi complete desde Martes.
El Sindicato Eléctrico de Cuba culpó al huracán Ian, que azotó el oeste de Cuba el martes, por el apagón. La compañía dijo el jueves que había restablecido el servicio en algunos lugares, pero que llevaría mucho más tiempo brindar energía a todo el país. Luego de varias horas sin electricidad, que para muchos también significaba sin agua corriente, cientos de cubanos dijeron que ya tenían suficiente.
“¡Conectar la alimentación!” un grupo de personas, en su mayoría mujeres, cantaban mientras bloqueaban la Calzada del Cerro, una concurrida avenida habanera, a última hora de la tarde del jueves. Con su refrigerador goteando agua, la comida estropeada y enfrentando mosquitos y calor, una mujer que pidió no ser identificada le dijo al Miami Herald que decidió unirse a la protesta.
“Todos están cansados”, se escucha decir a un hombre en uno de los movies. “Aquí no tenemos revolución sino… represión”.
Después de que la multitud comenzó a llamar la atención y creció, las luces en esa área volvieron a encenderse de repente.
Pero a medida que la protesta fracasó, otras comenzaron a aparecer por la ciudad.
Movies que circulan en las redes sociales muestran multitudes protestando en Arroyo Naranjo y San Francisco de Paula, en la provincia de La Habana. En San Francisco de Paula, un grupo de personas se sentó en la calle golpeando ollas y sartenes; conocido como cacerolazos. Hubo reportes de cacerolazos en otros barrios habaneros como Nuevo Vedado, Marianao y Boyeros, y en la ciudad matancera de Cárdenas.
La madrugada del viernes, el medio de comunicación independiente Cubanet informó que los residentes golpeaban ollas en las localidades habaneras de Guanabacoa y La Palma. El periodista independiente Ismario Rodríguez dijo que una protesta comparable se llevó a cabo en las localidades de Ayestarán y 19 de Mayo. Varios usuarios de las redes sociales también reportaron personas golpeando cacerolas en Santos Suárez, otro barrio de La Habana.
A medida que avanzaban las protestas, también comenzaron a round imágenes de un fuerte despliegue policial, así como informes de interrupciones del servicio de Web. Varios sitios net de medios estatales, incluidos Granma y Cubadebate, no se podían acceder desde el extranjero.
“Confirmado: las métricas muestran un colapso casi complete del tráfico de Web desde Cuba en medio de informes de grandes protestas por cortes de energía y malas condiciones exacerbadas por el huracán Ian, con fuerzas de seguridad desplegadas; Es possible que el incidente limite el libre flujo de información”, dijo en Twitter Netblock, el observatorio de Web que rastrea los apagones de la crimson.
El proyecto de análisis y detección de cortes de Web del Instituto de Tecnología de Georgia, así como Cloudflare Radar y Doug Madory, analista de Web de Kentik, confirmaron una caída complete en el tráfico de Web en Cuba alrededor de las 8:30 p. m. del jueves.
“Se interrumpe el servicio a nivel nacional”, dijo un empleado de la empresa estatal de telecomunicaciones de Cuba, ETECSA, en un audio publicado por la periodista independiente cubana Luz Escobar.
El servicio se restableció alrededor de las 3:10 am del viernes, dijo Madory.
El viernes, vecinos de Puentes Grandes, Marianao, Guanabacoa y La Palma golpearon ollas y bloquearon algunas calles.
El diario Granma del Partido Comunista de Cuba dijo el viernes que trabajadores del Sindicato Eléctrico lograron conectar las redes de occidente y oriente en la noche del jueves y que algunas centrales eléctricas estaban en servicio en todo el país. Sin embargo, el medio estatal de noticias Cubadebate dijo que se esperaban apagones en la mayoría de las provincias.
La ira se había estado gestando desde que las autoridades culparon por primera vez al huracán Ian por el colapso de la crimson eléctrica el martes por la tarde. Pero más tarde, los medios estatales cubanos informaron que la falla se debió a un cable roto, lo que sugiere que el deterioro del sistema también jugó un papel en lo que los funcionarios llamaron “una condición excepcional” que conduce a la “generación cero” de electricidad.
Toda la isla se quedó sin electricidad, incluso Holguín, en el lado este del país, que está en el extremo opuesto de la isla donde golpeó Ian. La noche del miércoles, vecinos de Libertad, un barrio de Holguín, estaban afuera de sus casas golpeando cacerolas, según un video compartido con el Herald.
“Estamos todos quemados, más de 30 horas sin luz. No entendemos por qué porque aquí no hubo huracán”, dijo la persona que grabó el video. “Tampoco tenemos agua corriente. El descontento es alto”.
El Herald no publica el nombre de la fuente ni el video, en el que se puede identificar claramente a muchos de los que protestan, para protegerlos de las represalias de las autoridades locales.
A pesar de las leyes y reglamentos aprobados recientemente por el gobierno para castigar las críticas públicas a las autoridades, varios cubanos recurrieron a las redes sociales para descargar sus frustraciones y cuestionar la falta de respuesta del gobierno ante la devastación que dejó el huracán.
La activista Diasniurka Salcedo Verdecia, cuya casa acquainted fue destruida por la tormenta, cuestionó la amplia cobertura mediática de la visita del líder cubano Miguel Díaz-Canel a la ciudad de Pinar del Río, que sufrió graves daños.
“Es muy indignante ver cómo usted, señor, posa para una foto cuando hay mucha gente sin hogar, sin luz, sin agua, sin lugar para dormir”, dijo Salcedo. “Tuviste el descaro de decirle al pueblo cubano que tenemos que ayudarnos entre todos. ¿Dónde están los recursos? ¿Por qué la gente tiene que esperar a que lleguen más donaciones?”.
El actor cubano Ulyk Anello, quien dijo que llevaba tres días sin electricidad, también culpó a Díaz-Canel de la situación.
“Renuncia, entrega esto”, dijo en un video publicado en las redes sociales. “Este sistema no funciona. La comida de mis hijos se está pudriendo y no me la vas a devolver. ¿Por qué no te vas ya?”
La redactora de El Nuevo Herald, Sarah Moreno, contribuyó a este despacho.
Esta historia fue publicada originalmente 30 de septiembre de 2022 5:38 a. m.